En el minuto 6 de partido Lampard falló un penalti, pero no hubo mayor problema ya que en el minuto en una buena jugada colectiva, con una gran asistencia de De Bruyne y gol de Oscar.
El Chelsea siguió apretando hasta que Lampard marcó el segundo en un lanzamiento de falta.
A partir de aquí el Chelsea bajó el ritmo y se limitó a controlar el partido.
Ayer el Chelsea jugó con una intensidad "tipica" de los equipos de Mourinho, en cuanto perdían un balón presionaban al adversario para recuperarlo.
Mourinho, además presentó un medio del campo muy ofensivo con Ramires y Lampard dos jugadores con mucha llegada y defensivamente estuvo impecable pese a la baja de David Luiz, hizo con que el Hull no creara peligro.
No hay duda de que si el Chelsea sigue a este nivel puede optar a todas las competiciones y además la unión que existe entre la grada, el entrenador y los jugadores ayuda a que todo sea más fácil.
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